La 10ª Torre

En el interior de la 10ª Torre, cualquiera puede perderse. Parece estar diseñada específicamente para ello, llena de escaleras falsas paredes y mecanismos que cambian las habitaciones de lugar, como si de un tremendo laberinto se tratara. En ella, las fuerzas de la gravedad y el espacio están distorsionadas, siguiendo su propia lógica, de forma, que no es en absoluto extraño encontrarse con escaleras boca abajo y gente andando por ellas con total normalidad (A menudos aquel que observa este fenómeno es de hecho el que está a la inversa sin darse cuenta de ello), o puertas del primer piso que llevan al tercero directamente. No obstante, cualquiera familiarizado con el caótico orden de la torre, es capaz de desplazarse por la misma con eficiencia, lo cual suele limitarse a las Fracciones, la 10ª Espada y el propio Zeero, que es de hecho el creador del espacio alterado en el interior de la torre, en uno de sus experimentos fallidos. Todas las paredes y escaleras son de un blanco nuclear, que daña a la vista con solo posar su mirada en ellas, estando así desde antes de que el actual 10ª Espada se instalase en ella.


La habitación de Argélion es igual a el resto, completamente blanca y carente de adorno alguno, a excepción de un ventanal en la pared del fondo. Dado el desapego a lo material de su habitante, y la no necesidad de los Arrancar de alimentarse o suplir funciones vitales algunas, considera que es mas que suficiente para desempeñar su función.