.:: Undécimo Escuadrón ::.

El undécimo escuadrón es la primera línea de defensa de la Sociedad de Almas. Allí donde hay batallas, están los valerosos hombres del undécimo escuadrón: entrenados sin miedo, con fuerte instinto de lucha y ganas de demostrar su valía. Hay quienes les tildan de inconscientes, pero cualquiera que pase por el escuadrón entenderá el orgullo particular que sienten sus integrantes por pertenecer a él y, sobre todo, de no ser del cuarto (=P).


Sus instalaciones son similares a las de sus homólogos de otras divisiones. Un gran edificio central, sede de la capitanía salas de reuniones, despachos y estancias personales de los oficiales; rodeada de varios edificios circundantes, con los dormitorios del resto de integrantes del escuadrón, el comedor general y los almacenes de suministros y material:


Además, hay un gran dojo de entrenamiento donde los integrantes del escuadrón pasan la mayor parte del tiempo, por orden del capitán. Nadie quiere blandengues en el undécimo escuadrón y eso es algo que aprenden los nuevos nada más entrar, con un duro entrenamiento que sólo soportan los que alcanzan a comprender el orgullo de pertenecer al escuadrón. Anexo al dojo hay todo lo necesario para completar el entrenamiento: un gimnasio, duchas y vestuario.


Para entrenamientos al aire libre, el escuadrón también cuenta con una inmensa pradera que también alberga las tradicionales fiestas de verano (y cualquier otra excusa que se busque para celebrar algo) que se dan en el escuadrón. De gran extensión, es un buen lugar para entrenar en grupos o alejado del resto.


Ya para temas burocráticos, dentro del primer escuadrón, están las salas de reuniones (también conocidas como "salas que no se utilizan desde el pleistoceno") y las estancias privadas del capitán, aunque no esperéis encontrarle allí. Probad antes en el dojo o vagueando en la pradera.